Caín

Hijo mayor de Adán y Eva (Gn. 4.1), en el momento de cuyo nacimiento Eva dijo, "he adquirido (qaµnéÆt_éÆ) varón". Ya que es improbable que este relato haya sido originalmente expresado en hebreo, no es posible hacer juicios sobre la validez del juego de palabras, y no puede llegarse a ninguna conclusión sobre la base de aparentes etimologías del nombre. Caín fue agricultor (Gn. 4.2), a diferencia de Abel, que fue pastor, y porque "era del maligno" (1 Jn. 3.12) y no estando en armonía con Dios (He. 11.4), su ofrenda fue rechazada (Gn. 4.3–7) y terminó matando a su hermano (Gn. 4.8). Dios lo castigó determinando que fuese errante, tal vez nómada, en la tierra de Nod (Gn. 4.9–16), y para protegerlo, a fin de que él mismo no fuese muerto, Dios dispuso una "señal" ‘señal, marca’, Gn. 9.12–13) "para" él. La naturaleza de dicha "señal" se desconoce. Caín fue padre de Enoc.

Se han trazado paralelos entre el conflicto de Caín y Abel y otros que aparecen en la literatura sumeria, en la que se relatan disputas relativas al mérito relativo de las actividades agrícola y ganadera, pero en ninguna de las que se conoce el agricultor mata al ganadero, y una disputa de esta naturaleza probablemente no hace sino reflejar la situación histórica en la Mesopotamia a partir del período prehistórico tardío en adelante. (Nómadas).